El mercado de la relojería de lujo atrae cada vez a más aficionados… y, por desgracia, también a más falsificadores. Si recientemente ha adquirido un reloj de prestigio o está pensando en comprar uno de segunda mano, es fundamental saber reconocer los signos de autenticidad. Aquí tiene una guía completa para identificar un reloj de lujo auténtico y evitar las trampas.
1. Compruebe los grabados, los logotipos y las inscripciones
Las marcas de renombre no dejan ningún detalle al azar. Grabados nítidos, inscripciones perfectamente alineadas, tipografía homogénea… Cada reloj auténtico lleva marcas cuidadosas, a menudo realizadas con láser, a veces incluso invisibles a simple vista. Una falta ortográfica o un logotipo mal colocado son señales de alerta inmediatas.
En algunas marcas, como Rolex, los números de serie están grabados en el reborde, y existen bases oficiales para verificar su correspondencia con el modelo. Si el número no aparece, está mal grabado o no se corresponde con el modelo, el reloj es sospechoso.
2. Observe el movimiento de las agujas
Un reloj mecánico automático auténtico se distingue por la fluidez de su aguja de los segundos. Se desliza con micromovimientos casi imperceptibles (generalmente de 5 a 8 por segundo). Por el contrario, una falsificación equipada con un movimiento de cuarzo tendrá una aguja que avanza con saltos más marcados, un detalle fácilmente detectable a simple vista.
3. Pruebe las funciones
Los relojes de alta gama suelen tener complicaciones técnicas: fase lunar, cronógrafo, reserva de marcha, etc. En un reloj falso, estas funciones pueden ser decorativas o estar mal sincronizadas. Por ejemplo, la aguja del cronógrafo que no se mueve o una fase lunar que avanza con las horas son anomalías frecuentes en las copias.
Otra prueba sencilla: intente manipular la corona. En un reloj auténtico, el ajuste es preciso y fluido, mientras que un mecanismo barato ofrecerá poca resistencia o un comportamiento errático.
4. Analice la calidad de fabricación
Los relojes de lujo se ensamblan minuciosamente con materiales nobles: acero 904L, oro, platino, titanio. Tienen peso, un tacto frío y un acabado impecable. Si el reloj le parece ligero, si observa rebabas, tornillos imprecisos o elementos mal alineados, desconfíe.
Para preservar este nivel de acabado y transportar su reloj con total seguridad, le recomendamos encarecidamente que opte por un estuche de lujo para relojes .
Preste atención a las proporciones de cada elemento: bisel, índices, agujas, hebilla desplegable… Una diferencia, aunque sea mínima, puede delatar una falsificación.
5. Compárelo con un modelo oficial
Una de las mejores formas de detectar una imitación es comparar su reloj con imágenes oficiales o con un ejemplar certificado del mismo modelo. Examine la tipografía, el tamaño de la caja, la separación entre los índices o incluso el cristal (de zafiro en los relojes auténticos).
Un buen ejemplo es la lupa de Rolex: debe ampliar la fecha 2,5 veces. Si la ampliación es escasa, probablemente se trate de una copia.
También puede consultar nuestros modelos de estuches para ver cómo protegen sus relojes las grandes marcas.
6. El movimiento: la prueba definitiva
Si persisten las dudas, abrir el reloj sigue siendo la prueba definitiva. En el interior, todo debe ser impecable: tornillos pulidos, puentes grabados, rubíes bien colocados, espirales visibles… Las copias, incluso las más logradas en el exterior, suelen revelar su naturaleza aquí. Atención, esta operación debe ser realizada por un profesional.
7. El precio: un indicador revelador
Un reloj de lujo nuevo vendido a un precio que desafía toda lógica rara vez es una buena oferta. Los relojes de segunda mano pueden ser más baratos, pero un descuento excesivo debe despertar sospechas. Si aún tiene dudas, infórmese sobre cuánto cuesta un reloj automático para evitar estafas demasiado tentadoras.
8. Confíe en un profesional
Si tiene la más mínima duda, no dude en acudir a un relojero cualificado o en utilizar un servicio de certificación independiente. Algunos proveedores, como Watch Certificate™, incluso emiten un certificado oficial en caso de falsificación, útil para una posible solicitud de reembolso.
Conclusión
Verificar la autenticidad de un reloj requiere un ojo atento, una buena dosis de sentido común… y, a veces, un poco de ayuda. Siguiendo estos pasos, reducirá considerablemente el riesgo de comprar una falsificación. Y si su instinto le alerta desde el principio, hágale caso: es mejor perder una «ganga» que invertir en una pieza falsa sin valor.